La realidad actual es que nos encontramos inmersos en un momento de cambios continuos. Cambios que se reflejan en nuestra sociedad y que están afectando nuestra manera de vivir y enfrentarnos a la vida. Muchos amigos me hablan de sus carreras profesionales; hay incertidumbre, también conformismo y mucho miedo. Siempre les contesto: “es el momento de reinventarse”, y todos coinciden en que es así pero solo unos pocos se atreven a hacerlo.
La mayoría de ellos se mantienen a flote como pueden en trabajos que no les hacen felices pero que les dan la tan buscada “seguridad económica”. Incluso a algunos la vida les dio la oportunidad de tomar nuevos derroteros más satisfactorios regalándoles con un despido y han vuelto a trabajos similares en los que se consumen día tras día. En el plano personal muchos sobreviven en relaciones grises que hace años acabaron o que nunca debieron empezar, buscando excusas para no romperlas o justificando su decisión porque podrían estar peor o por no hacer daño a sus hijos. Otros se mueven de flor en flor sin querer dejar marchar a su Peter Pan para no tener que enfrentarse a su verdadera realidad.
Solo unos pocos son lo suficientemente osados y valientes como para reinventarse y apostar por nuevos rumbos que les permiten ser realmente ellos, ser más felices y trayendo finalmente una mejor calidad de vida para todos aquellos que les rodean.
¿Qué les diferencia a unos de otros? La diferencia es que estos últimos no tienen miedo. Bueno, sí lo tienen, y a la vez son lo suficientemente valientes como para no dejarse paralizar por él.
Sin duda el miedo es una elección. El peligro existe, pero tú elijes tener miedo o no.
Sin lanzarte a vivir de manera irresponsable, haz hoy aquello que tu corazón te pide. ¿Cuánto tiempo estás dispuesto a seguir viviendo con miedo? Nunca volverás a ser tan joven como hoy. Dile a esa chica que la quieres. Deja tu trabajo frustrante y comienza a trabajar en lo que siempre has soñado. Ten ese hijo que deseas. Termina con esa relación que es una farsa, o que es tóxica y asfixiante. Ponte a estudiar lo que siempre quisiste estudiar. Vende tu casa y acepta esa oferta de trabajo en otro país. Apúntate a clases de baile. Pide perdón a quien ofendiste. Mírate al espejo y di que te amas tal como eres…
¿A qué esperas para comenzar a vivir la vida que siempre has deseado vivir?
En este mismo momento las dificultades existen, el fracaso es posible y aun así hay miles de personas despidiendo a sus miedos de sus vidas y haciéndose los dueños de su destino. No son diferentes a ti. ¿Qué te impide ser uno de ellos?